Crecer como persona
Nuestros ideales
¿Sabías que construimos nuestros modelos mentales de pequeños? Exactamente lo hacemos hasta la adolescencia, la plasticidad del cerebro se mantiene hasta que nos hacemos adultos, durante ese período genera cerca de 1.8 millones de conexiones entre neuronas por segundo, a partir de ahí empieza a caer.
Aprendemos estos modelos mentales a través del juego, motivo por el cual nuestra infancia es tan larga. Cuando jugamos, casi siempre, los juegos son supervisados por adultos y son los que nos enseñan qué está bien y qué está mal, cómo comportarnos, etc… “No pegues a tu hermano”, “no se tira arena a…”, etc. Otra forma en la que aprendemos es a través de las historias que nos cuentan, estas historias a menudo incorporan las propias creencias de quien las cuenta. Y por último, gracias @pablojimeno por recordármelo, fundamentalmente aprendemos por imitación por lo que oímos es muy probable que se nos quede para formar parte de nuestro modelo.
Una idea que a mí me rompió la cabeza es que nuestra visión de la realidad es una alucinación que produce nuestro cerebro, lo que vemos no existe tal cual, es la forma que le da nuestro cerebro. Por lo tanto, los modelos que tenemos contribuyen a esa versión de la realidad.
Ahora, piensa esto. Si nacemos en una sociedad machista, un mundo homófobo, racista, ¿cuántas posibilidades tienes de que tu modelo se construya con esas normas?
¿Estamos condenados?
No, esto no significa que no haya solución, solo hay que ver las conquistas sociales de las últimas décadas para entender que no estamos condenados a vivir en una sociedad así.
Sigue leyendo porque voy a contarte la solución (bueno a ver, mi granito que no es tan fácil) y porqué es tan complicado cambiar las cosas.
Lleva un tiempo tener conciencia de las ideas de uno mismo, como decía antes esto se forma mayormente hasta la adolescencia. He aquí la clave, a mas diversa es nuestra infancia, más expuesta a diferentes realidades más abierto es nuestro modelo mental, pero si solo nos rodeamos de gente que piensa de una manera, nuestro modelo mental será construido exactamente así. Es decir, estar expuesto a gente que no tiene los mismos modelos mentales, a diferentes narrativas del mundo hará que seamos más tolerantes a diferentes realidades. Así que es importante que de pequeños nos expongan, nos expliquen esta diversidad. Yo tuve la suerte de tener un profesor de ética que era psicólogo y nos ponía películas como El odio o Semillas de Rencor y luego teníamos que debatir los problemas que había.
La buena noticia es que la exposición también funciona en adultos, pero es muuucho más difícil. Y de hecho, no estoy seguro de que cambie 100% tu modelo cultural/mental pero si te hace consciente de que tu modelo no es justo o de que está equivocado.
¿Por qué ocurre esto?
Lo que pasa es que la plasticidad que teníamos en el cerebro no es la misma y eso hace que sea más complicado cambiar. Por así decirlo cuando estamos en el inicio de la madurez, nuestras mentes ya están “hechas”, nuestras ideas e ideales ya están mayormente fijados. Y el cerebro pasa de absorber nuevas ideas para construir el modelo a defender el modelo que tiene. En palabras del neurobiólogo Bruce Wexler: “Una vez que las estructuras internas están establecidas, le dan la vuelta a la relación entre lo interno y lo externo a nuestro alrededor. En lugar de que las estructuras internas se formen en base al entorno, las personas ahora actúan para preservar esas estructuras de los desafíos que le muestra el entorno y encuentra los cambios dolorosos.
Y aquí entran en juego los sesgos, es una de las formas que tenemos de defender nuestro modelo, Cuando encontramos una nueva idea, inmediatamente la juzgamos. Si es consistente con nuestro modelo, el subconsciente, repito, el subconsciente nos da una señal de Sí, es correcta y sino pues una señal de NO. Es decir, esto pasa antes de que pensemos de forma consciente.
Cualquier evidencia que sugiera que no tenemos razón nos hace sentir mal, nos genera estrés, etc. Nuestro cerebro genera sentimientos negativos y literalmente el cerebro entra en el mismo modo que cuando tenemos un ataque físico, esto se ha probado en el laboratorio y la respuesta en el cerebro es muy similar. Básicamente entramos en modo fight or flight. Lo que normalmente hacemos es combatir la idea que es contraria a nuestras creencias, intentamos por todos los medios convencer a la otra persona de que está equivocada y sino lo conseguimos, nos genera una frustración importante. Y muchas veces acabamos dándole vueltas al conflicto un montón de tiempo, buscamos adjetivos para descalificar a la otra persona y así sus ideas, etc.. Incluso buscamos aliados, gente que piensa como nosotros para corroborar nuestras ideas y rechazar las de los otros..
Como nuestra visión (alucinación ) de la realidad es tan clara para nosotros (es la única que nuestro cerebro nos muestra) no queda otra que pensar que la otra persona está equivocada, mintiendo o trastornada. Ahora piensa en esto, los otros piensan lo mismo de ti :D y es a través de este conocimiento que podemos cambiar. A más seamos conscientes de que nuestro cerebro va a intentar defender nuestras ideas/modelo de una forma irracional y más nos expongamos a otras ideas, culturas, etc más cambiaremos y creceremos como persona. Así que, empieza por seguir en twitter a esas personas que te hacen sentir incómoda, leer artículos de ideas políticas con las que no estás de acuerdo, etc.
Y éste, es precisamente el papel que juegan los activistas en la sociedad, exponernos a otras realidades. Algunas veces la única forma de que seamos capaz de verlos es armar un buen lío, piensa en Greenpeace cuando escala un edificio, cuando FEMEN se mete en la iglesia, etc
Post inspirado por @diana_aceves_ @ladybenko @LauraLacarra y el hilo de @vgaltes especialmente esto.
Buena parte de las ideas expuestas aquí vienen de este libro.